¿Cómo superar el desánimo espiritual?

El desánimo espiritual forma parte de la vida cristiana y se debe superar. Todo creyente que haya militado por varios años en la vida cristiana es probable que haya atravesado por una etapa gris de desánimo espiritual.

El desánimo espiritual no es sinónimo de dejar la vida cristiana y volver a la vida antigua, sino que nos plantea la idea en donde un cristiano vive una vida piadosa pero tiene ciertas dificultades para establecer una comunión de calidad con Dios.

El desánimo espiritual es aquella etapa en la que se vive una vida justa y se participa activamente en la Iglesia local pero nuestra vida devocional con Dios es muy pobre.

El desánimo espiritual se refleja con mayor facilidad en el tiempo que dedicamos a la oración.

El desánimo espiritual es una crisis que debemos superar. No está mal sentirse desanimado, el verdadero problema radica en reconocer que estamos en esa crisis y no hacer nada para superar el desánimo espiritual.

¿Cómo se manifiesta el desánimo espiritual?

El desánimo espiritual se manifiesta por la carencia de energía o de ánimos para hacer actividades de carácter espiritual, esencialmente orar y ayunar.

Alguien podría objetar y decir: «que el desánimo esencialmente consiste en dejar o abandonar la vida cristiana por completo.» pero no es así, ese es el resultado de una persona que no logro superar su desánimo espiritual.

Cuando alguien abandona la vida cristiana por completo es porque ha pasado por el valle del desánimo y lamentablemente ha salido en derrota. El desánimo como tal no es abandono, sino la falta de aliento, motivación, energía o fuerzas para hacer algo.

Posibles causas del desánimo:

Las causas de un desánimo pueden ser muchísimas y cada persona que atraviesa por uno nos podría dar muchas explicaciones por las que vino su desánimo, pero esencialmente los motivos principales son 3:

1. Un problema tremendamente grande.

Muchas de las personas que no lograron superar el desánimo espiritual se debe a que éste vino producto de problemas graves que surgieron de repente y no había esperanza de una solución.

Hay muchas personas que han caído en desánimo espiritual por que han fracasado económicamente, porque ha muerto un ser querido, por la separación de los padres, por un divorcio, por una enfermedad crónica etc.

A como dije antes el problema no está en pasar por un tiempo de desánimo, sino en no levantarse para superarlo. Si te sientes desanimado te ánimo a que te levantes y eches ganas para seguir adelante.

2. Haber caído en pecado.

Otro motivo por el cual puede venir el desánimo es haber caído en pecado. Obviamente después de que hemos cometido un error o hemos pecado en algo sentimos casi de inmediato un sentimiento incómodo de culpabilidad.

Dios pone en nosotros ese sentimiento de culpabilidad en donde nuestra conciencia nos acusa por no hacer lo correcto. Pero esta en nosotros tomar la decisión de arrepentirnos y seguir hacia adelante o desanimarnos y darnos por vencido.

Ante esas dos opciones, hay personas que lastimosamente escogen la segunda, en lugar de arrepentirse y acercarse a Dios, se alejan de Él sintiéndose inmerecedores del perdón de Dios.

Cuando se le falla a Dios la solución no es darse por vencido e irse por donde se vino. Sin importar el pecado que hayamos cometido Dios nos da otra oportunidad más para seguir adelante.

3. Falta de apoyo moral en el entorno íntimo.

Esta es una causa menos popular en el sentido de que son menos las veces que se admite que esta sea la razón por la que venga el desánimo.

Es un reto mayúsculo el seguir hacia adelante en la vida cristiana cuando existe poco respaldo moral por parte del cónyuge o la familia, o bien cuando se es víctima de violencia en el entorno familiar o se nos tenga poco respeto.

Hay que superar el desánimo espiritual.

El desánimo espiritual puede aparecer en tu vida, pero es tu tarea superarlo, no puedes permitir que el desánimo te aleje del amor de Dios. Debes de esforzarte y luchar por salir hacia adelante, no puedes quedarte sin hacer nada.

Hay varios personajes bíblicos que a pesar de la calidad de relación que tenían con Dios experimentaron el desánimo en sus vidas, por ejemplo: El rey David (Salmos 38:4; 42:11), el profeta Elías (1 Reyes 18-19), el profeta Jonas (Jonas 4), Noemí (Rut 1:19-21), Job (Job 3:3-4) y también el profeta Jeremías (Jeremías 20:14; 18).

Esos personajes experimentaron dolor y sufrimientos tremendos que trajeron a sus vidas desánimo enormes, pero a pesar de ello salieron hacia adelante, no se quedaron varados.

Todos tiene algo en común, y es que su fe y confianza en Dios no mermó a pesar de su condición psicológica, física y espiritual, sabían que no podían salir hacia adelante por sí mismos así que creyeron que Dios les ayudaría a hacerlo.

Al ver el Ejemplo de esos 6 hombres que experimentaron desánimo, podemos extraer 3 consejos o recomendaciones muy importantes para poder superar el desánimo espiritual:

  1. Fe en Dios.
  2. Confiar y esperar en Dios.
  3. No dejar de buscar a Dios.

Si estas desanimado, pon tu fe en Dios, confían en Él y eso te dará las fuerzas suficientes para seguir hacia adelante en la vida cristiana.

Quizás no estés orando o ayunando como antes, pero te recomiendo que a pesar de ello, no dejes de estudiar la Biblia y de congregarte, porque eso te alimentará espiritualmente para agarrar nuevas fuerzas y salir del desánimo.

Conclusión:

No te sientas mal contigo mismo si te sientes desanimado, mi recomendación es que a pesar de ello, no abandones la vida cristiana y veas el desánimo como un punto bajo momentáneo en tu vida espiritual.

Es probable que quizás necesites hablar con alguien para que te brinde ayuda o puedas al menos expresarte sin temor a la indiscreción, podrías perfectamente recurrir al pastor de tu Iglesia o a un líder.

Espero que este tema te haya ayudado mucho en tu vida. Así que a superar ese desánimo espiritual en el nombre de Jesús ¡Dios te bendiga! 😁

Puedes leer nuestro post anterior AQUÍ: ¿Qué dice la Biblia sobre el pecado?

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