Sabemos perfectamente que las Escrituras nos hablan de las raíces de amargura y sus consecuencias, pero también es importante para nosotros poder identificarlas y con la ayuda de Dios darles el tratamiento necesario.
📖 Lectura Bíblica:
«Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados;» Hebreos 12:15 (RVR1960)
El significado bíblico para «RAICES DE AMARGURA» es: Un sentimiento maligno (Dolor, odio, orgullo, resentimiento, ira, venganza, desprecio, discriminación, etc) que se aferra en el corazón y llega hasta lo más profundo del alma.
Una raíz de amargura se desarrolla igual que el ciclo de vida de una planta, ya que se siembra, brota, crece, se alimenta, madura y da frutos (frutos malos y dañinos para toda persona).
La amargura no es uno de esos pecados grandes y llamativos que se puede ver creciendo en la superficie de nuestro corazón, es un pecado durmiente ya que crece bajo el suelo del corazón.
Pero aquí en este pasaje bíblico la advertencia del autor de Hebreos es que la raíz de amargura brotará algún día y cuando esto suceda, nos dice que «muchos serán contaminados.»
Sí esa raíz de amargura sigue creciendo habrá una cosecha de dolor, tanto para ti como para las personas de tu entorno.
Debido a que la amargura es un pecado lleno de malezas que se entierran primero en nuestros corazones, necesitamos la ayuda de Dios para sacar de un tirón esa raíz.
¿Cómo afectan las raíces de amargura?
En conclusión la amargura es un resentimiento que viene, es un veneno para el alma y va contaminando todo hasta que destruye la vida y relaciones de una persona.
La raíz de amargura es como una planta mala que se come todo lo bueno del corazón, trayendo soledad, ruina, y hasta en la mayoría de los casos enfermedad.
Una de las causas más importantes por las que pueden quedar raíces amargas es la falta de perdón, ya que PERDONAR es una llave que nos abre paso a cicatrizar las heridas del alma.
Pero sin embargo, no es un trámite muy sencillo, porque si todos pudiéramos perdonar de corazón, no habría tantas personas enfrentadas y afectadas con raíces de amargura.
Cuando una mente está herida se alimenta de amargura, y sólo con paciencia, amor, comunión con Dios y oración podemos ayudar a su recuperación.
¿Cómo puedes deshacerte de LA RAÍZ DE AMARGURA que se encuentra alojada en tu corazón?
Tomando lo bueno de todo lo malo que te sucedió, decidiendo perdonar, pidiendo perdón a Dios y a las personas que sabes que has ofendido, pero siempre haciéndolo con todo tu corazón.
Debes expresarle tu perdón en forma de confesión a Dios.
También arrepentirte por haber juzgado a la persona que te hirió. Muchas veces, por la amargura juzgamos a las personas y eso se termina convirtiendo en una mayor raíz de amargura.
La amargura puede ser algo terrible para tu vida, por esto, aprende a ser perdonador, confía en el Señor porque las circunstancias que no puedes cambiar, seguramente El las cambiará.
En la cruz Jesús experimentó el quebranto, sufrió angustia por amor a ti y a mí, hoy Él quiere que seamos libres de toda amargura, para ello, sólo tenemos que decidir darle el primer lugar en nuestras vidas y así le daremos el lugar para que sane nuestra alma.
Puedes leer nuestra anterior titulada: «La libertad del Espíritu.»
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Escritor, filósofo, apologeta y youtuber cristiano ampliamente comprometido con la verdad. Fundador de la plataforma digital: Pura Biblia.